Durante la gala de los Premios Cervantes al Deporte 2023 celebrados el pasado mes de diciembre, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares (Madrid) concedió el Premio honorífico a la trayectoria deportiva a Marisa Arranz (1963-2022).
La que fuera entrenadora y jugadora de baloncesto alcalaína, y coordinadora del proyecto de baloncesto y de deporte adaptado de Holystic ProÁfrica en Wukro (Etiopía), fue galardonada a título póstumo por toda una vida dedicada al deporte de la canasta. Su marido, Alfredo, fue el encargado de recoger el premio: “Para Marisa, el baloncesto fue siempre su gran pasión, y en todas sus facetas lo hacía bien”, dice.
Toda una vida en la cancha
Marisa se inició en el baloncesto de competición en las categorías inferiores del Avon Alcalá. Cuando estaba en la categoría juvenil/junior fue convocada por la Selección Española de Baloncesto y participó en la Copa de la Reina de la temporada 1979-1980. Entre los años 1982 y 1986 jugó en el equipo de División de Honor.
Como jugadora, tuvo que dejar la alta competición por una lesión de rodilla muy grave. Es a partir de ese momento cuando se convierte en entrenadora. Sus inicios fueron en el Centro Iniciación Técnico Deportivo (CITD) de Alcalá de Henares y empezó entrenando en las categorías inferiores del Iplacea, equipo con el que disputó el Campeonato de España en la categoría cadete femenino en la temporada 1985-1986. Esa misma temporada obtuvo el título de Entrenador Superior de Baloncesto, siendo una de las primeras mujeres españolas en conseguirlo.
Posteriormente, pasó a las categorías inferiores del CD Caja Madrid. En este club consiguió el campeonato preinfantil masculino de Madrid sin conocer la derrota y en la categoría cadete masculino llevó al equipo al Campeonato de España (1990-1991).
Dejó los banquillos durante unos años hasta que volvió para ser segunda entrenadora en 2010. Fue precisamente en ese año cuando comenzó su labor solidaria en Holystic ProÁfrica, siendo la principal impulsora de la escuela de baloncesto en la localidad etíope de Wukro. “Siempre que regresaba de Etiopía, solía decir: ‘tienen tan poco y te lo dan todo'”, recuerda Alfredo.
Falleció en noviembre de 2022 como consecuencia de un cáncer. El 18 de diciembre de 2022 amigos, familiares, excompañeros de baloncesto y miembros de Holystic ProÁfrica rindieron su particular homenaje a Marisa, una mujer pionera del baloncesto femenino en España y de incalculable valor por su trabajo solidario en África.
En homenaje a su legado y para que su memoria siga presente en África -continente que amó-, desde el pasado mes de julio una cancha de baloncesto construída con fondos de la ONG en la localidad de Bala (Uganda) lleva el nombre de Marisa Arranz.
*La foto que abre la pieza la hicieron desde el Ayuntamiento de Alcalá de Henares durante la ceremonia de los Premios Cervantes al Deporte 2023.