La clínica es el corazón de Holystic ProÁfrica. En ella realizamos más de 3.000 tratamientos gratuitos a niños con necesidades especiales cada año.
Si el verdadero viaje a África para los voluntarios empieza cuando volvemos al hogar, ¡en el caso de la clínica fue exactamente al revés! Su viaje empieza la primera vez que Pablo, y su enorme corazón, pisaron Etiopía.
Desde el primer instante, tuvo claro que su vocación era ayudar a los niños con necesidades especiales. Pero la tarea no era fácil. En África, se considera malditos a los niños con discapacidad (desde el punto de vista social y religioso). Así que sus familias sienten vergüenza de sacarles a la calle, llevarlos al colegio, o al mismo hospital. Es una situación parecida a la que teníamos aquí hace 80 años, en nuestra sociedad rural.
La casualidad quiso que, en su primer viaje a África, Pablo pudiera encontrar y tratar a varios niños discapacitados. Y después de Pablo, muchos de nuestros voluntarios empezaron a viajar a Etiopía. Al principio en verano. Luego, durante todo el año. Hoy, la base la clínica son los fisioterapeutas locales. Además de tratar a los niños, cuidan de las familias y hacen que el proyecto sea sostenible a largo plazo.
Para los próximos años el futuro pasa por colaborar con hospitales, colegios, e instituciones sociales para facilitar su integración a todos los niveles. Y que disfruten de los mismos derechos y oportunidades que tienen nuestros niños discapacitados en España. Niños que aquí cuentan con facilidad para la movilidad en sillas de ruedas, aulas de educación temprana, el apoyo de instituciones privadas y públicas… y lo que es más importante ¡la conciencia social de que hay que cuidarlos y protegerlos.
Rafa Llanes es Coordinador del Proyecto Clínica en HOLYSTIC PROÁFRICA.